Esta es la premisa principal del libro de Amy Morin, “Las 13 cosas que las personas mentalmente fuertes no hacen”, una obra que es sinónimo de la disciplina mental que todo emprendedor debe tener en su escritorio para actuar acorde con sus objetivos y mirar las situaciones como circunstancias, y no como algo definitivo en la vida.
Así que en este libro se plantea que al igual que la fuerza física, la fuerza mental requiere de hábitos saludables, ejercicio y trabajo arduo. Por eso que con esta obra se aprenderá cómo adoptar un enfoque más positivo, y ofrece las armas, para lidiar con las dificultades de la vida y programar el cerebro para la felicidad y el éxito.
Aquí tienes aquellas cosas que las personas mentalmente fuertes no hacen cada día de su vida:
- No pierden tiempo auto compadeciéndose
Las personas mentalmente fuertes no malgastan sus energías en lamentarse sobre diversas situaciones adversas, sino que asumen la responsabilidad por sus propios actos y entienden que la vida no siempre es fácil.
- No renuncian a su poder
Estas personas no permiten que otros los controlen, ni se someten a la voluntad de nadie porque entienden que controlan sus propias emociones y pueden elegir cómo reaccionar a una situación crítica.
- No tienen miedo a los cambios
La gente con fortaleza mental no trata de evitar los cambios. Por el contrario, asimilan estos cambios de forma positiva y están dispuestos a ser flexibles porque entienden que existen situaciones que son inevitables.
- No malgastan energía en cosas que no pueden controlar
Nunca una persona mentalmente fuerte se queja sobre maletas perdidas en la terminal terrestre o atascos en el centro de la ciudad: se centran en los aspectos de su vida que pueden controlar.
- No intentan agradar a todo el mundo
Son conscientes que no necesitan agradar a todo el mundo todo el tiempo. No tienen miedo a decir “no” o mantenerse firmes cuando es necesario. Pero se esfuerzan en ser amables y justos.
- Asumen riesgos calculados
Son capaces de asumir ciertos riesgos controlados por lo que dedican el tiempo a sopesar los riesgos y beneficios antes de tomar una decisión importante, y se informan bien de los peligros potenciales antes de tomar acción.
- No se estancan en el pasado
Las personas mentalmente fuertes no sienten nostalgia del pasado ni desean que las cosas pudieran ser diferentes, por lo que asumen su pasado y pueden decir lo que han aprendido de él.
- No caen una y otra vez en los mismos errores
Aceptan la responsabilidad por su conducta y aprenden de sus errores pasados. Así que no repiten una y otra vez esos errores. En cambio son capaces de tomar decisiones más inteligentes gracias a su experiencia.
- No envidian el éxito de otros
También tienen la capacidad de apreciar y celebrar el éxito de otros en la vida. Por eso que no son envidiosos ni se sienten enfadados cuando otros los superan. Reconocen que el éxito viene del trabajo duro y están dispuestos a esforzarse para ser exitosos.
- No abandonan tras un revés
Si han fracasado no es motivo para “tirar la toalla”, sino que usan este revés como una oportunidad para crecer y mejorar. Y tienen voluntad para seguir intentándolo hasta que lo consiguen.
- No temen la soledad
Las personas de este tipo también toleran la soledad y no temen el silencio por lo que utilizan ese tiempo para ser productivos. Así que disfrutan de esos momentos y no dependen de los demás para ser felices.
- No sienten que el mundo les deba nada
No se sienten con derecho a nada en la vida y no piensan que otros deban darles algo. Así que buscan oportunidades basándose en sus propios méritos.
- No esperan resultados inmediatos
Cuando se esfuerzan para levantar un nuevo negocio, ellos no esperan resultados inmediatos. Sino que aplican sus habilidades y tiempo al máximo y entienden que los cambios toman tiempo.